enlanube
Estás en la inopia, es lo que diría mi abuelo a cualquier Fernando Alonso de Twitter. Hay mucho angelito sin alas revoloteando en la nube, vendiendo bisutería en las puertas del cielo, como un atajo de tenderos en un bazar árabe. Y no se puede ser más claro, pues escribo esto al ver como personas a las que aprecio, invierten su dinero y su futuro en promover su negocio en una atracción de feria que solo da vueltas. Y que conste que me encantan las redes sociales, al igual que me gusta programar, viajar o conocer personas. Pero a cada cubierto su plato, no mezclar churras con merinas o zapatero a tus zapatos. España, siendo la primera potencia Europea en Twitter, no es garantía de éxito para abrirte mil puertas. Solamente si da la casualidad que alguien pasaba ante nuestro puesto de feria, comprará o como mucho mirará nuestra mercancía. Por desgracia esto no es EE.UU en lo que a negocio en redes sociales se refiere. Aquí me temo que es más efectiva una cartulina en un escaparate de una tienda, que tener a más de veinte mil seguidores. Por lo tanto, no perdamos mucho el tiempo en enviar tuits al vacío de un pozo electrónico y usemos la cabeza, esa gran desconocida para algunos políticos y directivos de empresa.

Como decimos en marketing, segmentar el mercado y utilizar las herramientas que existen, para automatizar mensajes y programar nuestros contenidos. Fijar quién es el usuario que deseáis para vuestro producto. Rastrearle, seguirle y perseguirle. Hay muchas estrategias. Os recomiendo crear las vuestras con retales de aquí y de allá, personalizarlas a vuestro negocio. No sigáis a señores o señoras que viven en la nube o mejor dicho en la parra. Vuestro trabajo, imagen, negocio, os pertenece. Ser pioneros e inventar, hay un mundo por cambiar de arriba abajo. Aquí hay que ser realistas y llamar las cosas por su nombre.
No esperéis jamás que un San Benito os encuentre por Twitter y os compre toda la vajilla, el trabajo de campo es necesario ahora y hace tres mil años. Twitter es el mejor conector de personas de la historia, eso no lo dudo, pero de conocer personas a vender nuestra vajilla de productos, hay todo un abismo.

Por Rubén García Codosero

Escritor y programador o viceversa.

Un comentario en «La inopia»
  1. Completamente de acuerdo, una cosa es estar en un TL o un muro y otra muy distinta que compren el producto. El trabajo del comercial ha cambiado y este cambio es el que deben asumir los “jefes/dueños” para innovar y utilizar las tecnologías de las rrss para encontrar el cliente.

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