Corren malos tiempos para la lírica. Así es como se llamaba una canción de los años 80 de un grupo musical que llamado Golpes Bajos. Con esta introducción quiero denunciar una mala práctica que se viene realizando en Twitter por “supuestos” expertos en dicha red social. Lo de supuestos lo comento, porque no sé qué organismo oficial o institución les ha otorgado dicha distinción.
Quizás se han desplazado a las oficinas centrales de Twitter en San Francisco y un docto empresario les ha laureado cual César romano. Bueno como dice la canción son malos tiempo para la lírica por lo que dejaré de “florear” expresiones y voy al grano.
Lo de mala praxis viene dicho, por si son expertos de algo, están cometiendo un error humano, una neglicencia. De un tiempo a esta parte, una serie de “famosetes” de Twitter usan una práctica que se vendería muy bien en el rastro de Madrid, junto a los famosos trileros. Consiste en seguir a todo usuario viviente. Cuando el incauto corresponde al prodigioso twittero devolviéndole el seguimiento, el bandolero digital, deja de seguirle. Con ello consigue tener más seguidores y menos seguidos. Es una mala práctica que se hace para que el índice klout de influencia suba, ya que se engaña haciendo creer a klout y google que están ante un tipo “importante”. Pero por suerte, nosotros no somos robots y lo que debemos de hacer es dejar seguir con la misma premura a esta banda del Twitter.
Para detectarlos os recomiendo socialbro o unfollowers.me, para que os avise cuando esto ocurra. A mí me sucede casi todos los meses, con personas “relevantes” en Twitter y cuentas corporativas. Entiendo los unfollow de las cuentas corporativas y a sus community manager españoles. Me los imagino diciendo “Si no sigue a mi empresa, importadora de vasijas de aluminio, pues no le sigo, Ea!” Y yo le diría: ¿has visto mi perfil?, ¿por qué has pensando que iba a seguir a tu empresa? ¿por cortesía? ¿soy un fan del aluminio?. Una cosa es seguir a personas y otra a cuentas cooperativas, señor community corporativo, que te lo enseñen en un buen curso, o mejor apréndelo con la práctica.
A las personas que practican esta mala praxis, les digo que si quieren seguir creciendo con su proyecto van a tener que escuchar y valorar un poquito más a las personas. Un buen proyecto requiere inversión de tiempo y trabajo, espero que no sigan con “atajos” ya que no van a conseguir el efecto deseado. De momento engañan a google, pero jamás a las personas.
Como ejemplo seguir a Gary Vee. Un video al día, durante años, sin descanso para crear su legión de seguidores. Solo trabajo y constancia, las malas praxis para los oportunistas. Elegir.
